Aplaca Señor tu
Santa Ira
Y líbranos de este
cruel castigo
El mundo es hoy
sangrante herida
Que solo curará si
está contigo
Tu olvido
merecemos, yo lo sé
Pues somos de tu
ira los causantes
Pero en aras de tu
amor y de mi fe
Hoy me postro ante
ti para rogarte
Que te apiades,
desplegando tu poder
De esta humanidad que
Tú creaste
Una humanidad ingrata
y arrogante
A los dones que
amoroso le entregaste
Y que ahora que ha
perdido tu cobijo
Suplica el perdón,
que en memoria de tu hijo
Al hombre un día
le otorgaste
Este mundo, a
veces indomable
Merece la respuesta
de tu enojo
Mas no seas Señor
tan implacable
Pues tratando de
limpiarle de rastrojos
Arrancas también
las hierbas buenas
Que crecen
mezcladas con abrojos
Aplaca Señor tu Santa
Ira
Y líbranos por fin
de este castigo
El mundo a vivir
en paz aspira
Y solo lo podrá
lograr contigo
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